Primero, nos aseguramos de entender bien sus objetivos. Le damos varias opciones de solución a sus proyectos audiovisuales en cualquier etapa; los presupuestos no nos limitan, entregamos el máximo de nuestra creatividad en cada faceta del servicio. En la realización cuidamos el arte, que todo luzca correctamente, tal como el propósito de cada toma ha sido diseñado. En el rodaje no se imagina cuánto nos divertimos. Cada silencio de concentración, cada alegría, cada sonrisa por haber conseguido la toma perfecta, cada repetición que debemos realizar puesto que no estamos exentos de errores y si no los tenemos de todas formas repetimos para tener más de donde elegir. Las opciones son importantes y nuestra socialización de las ideas en cada ensayo lo es más aún, porque sabemos que todo es “perfectible”
Así desarrollamos su proyecto. En los “cortes” cuando enseñamos el material en bruto al “crew” o equipo de producción, cada grito de “éeeesaaaa eesssss” nos conmueve, nos da alegría, nos genera confianza, saber que vamos desarrollando su proyecto como nos lo han pedido, como lo hemos conversado, saber que el proyecto va quedando con el objetivo señalado nos hace sentir bien. Es el porqué existencial de Memoriazul. Nada sin alegría, nada sin la sana diversión de nuestro honesto trabajo creativo.
Después el asunto de la post producción es aún más divertido. El procesamiento de imágenes, el hacer vibrantes los colores, el corregir detalles, poner efectos especiales, animaciones, o textos, nos deja llenos, completamente llenos de satisfacción. La música, el audio comercial o el pulir la captación sonora es la cereza del pastel. Nos hace vibrar, literalmente bailamos de exitación y alegría al ver cada creación lista para que a su vez, la disfrute el contratante y toda la gente que se llevará el contenido del material audiovisual, de su proyecto.